Inicialmente, los servicios de transmisión -Netflix en mente- hicieron la vista gorda a la práctica de compartir contraseñas, es decir, dar acceso gratuito a su cuenta de Netflix a alguien que no vive bajo su techo.
Compartir contraseñas, ¡déficit estimado!
Efectivamente, era una forma de darse a conocer para incentivar nuevas suscripciones. Pero hoy en dÃa esta moda tiene el efecto contrario en el crecimiento de las suscripciones, lo que empuja a Netflix a probar nuevos métodos para fijar precios para compartir contraseñas. Según un estudio reciente de Cordcutting, Netflix podrÃa perder $790 millones este año solo porque los consumidores aprovechan el servicio de forma gratuita. Esta es la mayor pérdida entre todas las plataformas de transmisión (Disney+ 440 millones este año). Sumando los principales servicios OTT -Netflix, Paramount+, Amazon Prime Video, Peacock, HBO Max, Disney+ y Hulu- las pérdidas ascenderÃan a un total de 2.300 millones de dólares en 2022. También según este estudio, entre los usuarios de servicios de streaming en UU., el 25 % lo disfruta de forma gratuita.